El presidente de Nuevas Generaciones de Madrid, Ignacio Dancausa, ha denunciado el sectarismo del presidente del Gobierno a la hora de redactar el proyecto de Ley de Empleo, el cual, según se ha conocido por los medios de comunicación, dará preferencia a las personas LGTB en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal. “La política de empleo de Sánchez es discriminatoria y sectaria”, ha asegurado.

«No se ha avanzado tanto en materia de respeto para que en pleno 2022 el PSOE les vuelva a señalar y estigmatizar», ha señalado el presidente. En este sentido, considera que “el socialismo nunca ha defendido a estos colectivos, los ha utilizado siempre con fines electorales, tratan de segmentar la sociedad con el objetivo de utilizarla”.

Se trata de una medida tremendamente grave y discriminatoria, desde NNGG Madrid recordamos que esta cuestión está recogida en la Constitución Española, en su artículo 14 donde dice que los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.

Ante ello, desde la organización juvenil del PP de la Comunidad de Madrid, conscientes de la pésima situación laboral en la que se encuentra España, especialmente para los jóvenes, reclamamos que las políticas del Gobierno en

materia laboral sirvan para crear empleo, mediante bajadas de impuestos que incentiven la contratación o la eliminación de trabas en nuestro país.

Debemos recordar que España duplica la media europea de paro juvenil con casi medio de millón desempleados. El 26,6% de los menores de 25 años siguen sin encontrar empleo en nuestro país según los datos publicados por Eurostat. Mientras tanto, el ejecutivo, en vez de preocuparse en que los jóvenes encuentren empleo y puedan independizarse, prefieren establecer leyes ideológicas que no benefician a nadie. Es una falta de respeto a los jóvenes que estudian y trabajan duro para sacar adelante sus vidas, una vez más, desincentivando la cultura del esfuerzo para que seamos dependientes del estado y reduciendo a las personas a meros números dentro de sus colectivos.